Así, paseé esos pocos minutos que duró mi trayecto sin pensar en nada. Sin pensar en mis problemas, en mis preocupaciones. Tan solo disfutando de ese corto momento que me robó una sonrisa y en el que el tiempo y el espacio se aliaron para hacerme sentir la magia de las calles inglesas que ya creía haber olvidado."
